ISASAWEIS

Hablamos con Isabel Llano, pionera en el mundo #Influencers

Eres escritora, blogger y una de las influencers con más impacto en redes sociales. Empezaste en un ámbito poco explorado en 2009, así que nos gustaría saber cómo surgió la idea de comenzar a hacer videos para dar tips, consejos y mostrar tu estilo de vida.

Realmente estudié Ingeniería Técnica Informática y después hice oposiciones para ser profe. Estaba trabajando de profesora en Cantabria y, aunque soy asturiana, trabajaba allí porque fue donde obtuve la plaza de interinidad. Así que, como tenía mucho tiempo libre porque estaba lejos de mi tierra, empecé a ver videos en internet y vi vídeos de chicas americanas que hacían trucos y consejos de maquillaje.

En aquel momento, en España, lo hacían cuatro personas, no había lo que hay ahora. De hecho, no existía ni Instagram. Entonces, como a mí siempre me ha gustado mucho el poder ayudar, contar trucos… También me gusta mucho hablar, la comunicación… Dije “yo tengo que apuntarme a esto porque me encanta” y así fue. Compré una cámara de vídeo, me senté a los pies de mi cama y empecé grabar.

Llevas años creando contenido e inspirando a las personas que te siguen, ¿cómo has vivido el hecho de ser una de las pioneras del término y oficio de “influencer”?

Muy bien, esta profesión realmente nos la inventamos. Nos la sacamos de la manga las personas que hacíamos contenido hace tantísimos años y lo hemos visto crecer.

Es verdad que los comienzos fueron inciertos, digamos… Porque teníamos nuestra profesión, con la que nos ganábamos la vida, pero esto nos encantaba. Y claro, no era remunerado, lo hacías como un hobbie. Pero, poco a poco, las marcas se fueron fijando en nosotros, nos fueron proponiendo hacer colaboraciones… Y, al principio, como te digo, lo hacíamos hasta con un poco de vergüenza; le pedíamos a la gente permiso. Era todo muy inocente, muy bonito…

Es verdad que, con el tiempo, todo ha cambiado muchísimo. Ahora es una profesión a la que se dedican muchas personas y yo estoy encantada, porque he visto cómo algo que nació de la nada, de un hobbie, de pura pasión por comunicar y por contar cosas, se ha convertido en la profesión de muchas personas, así que estoy feliz.

Sabemos que eres aficionada a la moda, al deporte, el cuidado y la cocina, podemos ver todo esto en tus redes, pero, ¿hay algo que te gustaría mostrar a tus seguidoras y que sea totalmente inesperado?

Bueno, en realidad, tengo un perfil un poco atípico, porque la mayoría de las personas que se dedican a esto se encuentran en algún sector. Por ejemplo, la moda, la belleza, el deporte, la nutrición… Pero, en realidad, mi perfil no nació desde la idea de querer comunicar algo como un profesional, como hacen otras cuentas. Yo simplemente era una chica de su casa, normal y corriente y como todas las demás.

También, soy muy inquieta y me gusta aprender mucho. Entonces, sé muchas cosas, digamos, pero no soy experta en nada. Así que, al igual que me gustaba contárselo a mis amigas, encontré la forma de poder contárselo a muchas más personas y de ayudar o llegar a más gente… Así es cómo nací y así es cómo sigo.

No sé de qué voy a hablar mañana porque dependerá de lo que me pase, sigo trabajando así. Empecé contando cosas de maquillaje y con el tiempo pasé de decir públicamente “odio los gimnasios”, “soy anti gimnasios”, “soy incapaz”, “¿cómo hace la gente para salir a correr?” o “me duele la cabeza cada vez que salgo a correr” a, de repente, encontrar ese clic, esa motivación… Ahí dije, “esto se lo tengo que contar a la gente”, porque hay muchas personas queriendo hacer deporte y no terminan de encontrar ese impulso. Así empecé a crear ese contenido.

Después fui mamá, cosa que no había sido nunca y me surgieron muchas dudas. Con el tiempo, fui aprendiendo a hacer mil cosas y dije “esto se lo tengo que contar a las que vengan detrás de mí”. Y así sigo… Ahora, voy para 48 años y mis hijos van para adolescentes, ahí seguramente tendré más cosas que contar.

Has escrito varios libros de cocina y obras algo más personales y distintas como “Tómate un café conmigo” o “De momento”. Y ahora, “Come de todo, entrena conmigo y cambia tu vida” es tu obra más reciente, ¿podrías hablarnos un poco del proceso al escribir este nuevo libro?

Llevo ya once libros publicados y es verdad que comencé con libros de cocina porque las recetas me gustan mucho. Hago una cocina muy práctica, sencilla y con cosas del día a día, pero muy resultona y que está muy rica. Entonces, la gente que me sigue en redes sociales me decía que lo que más les gustaba de mis recetas era lo ricas que están y que les encanta el resultado. Así fue cómo me empezaron a pedir un libro de cocina, que al final fueron varios. Luego, es cierto que surgieron otros proyectos más personales y los fui transformando en libro, por aportar otras cosas.

La gente que me sigue lleva 15 años conmigo y han visto ese cambio que he dado, no solamente físico, sino también mental, de fuerza, de energía… He cambiado y me encuentro mejor ahora que cuando tenía veintipico. Tengo más fuerza y más energía, a parte de la actitud y la tranquilidad que te da el ir cumpliendo años.  Cogí todo esto y dije “tengo que ayudar a las personas que también quieran hacerlo”. Porque uno muchas veces se siente un poco perdido o solo al ver, por ejemplo, gente en Instagram haciendo deporte todo el día, comiendo tan bien, con esos cuerpos perfectos… Y dices “yo no puedo”, pero si ves el ejemplo de una persona como tú, que ni tenía muy buen cuerpo, ni le gustaba hacer deporte, ni comía especialmente bien; y, de repente, ha dado ese cambio y la ves tan bien. Esta es una forma de animar a la gente a conseguirlo.

Entonces, este nuevo libro, “Come de todo, entrena conmigo y cambia tu vida”, se compone de tres pilares, que son esas tres frases. “Come de todo” es la parte de alimentación, recetas, cómo hacerlo fácil, sencillo, rico y saludable. Luego, “entrena conmigo” es la parte de deporte en la que cuento cómo pase de no hacer deporte a disfrutarlo, porque el deporte me ha cambiado la vida. A parte, hemos metido rutitas deportivas en vídeo a las que se puede acceder a través de un QR y entrenar conmigo para, precisamente, ayudar más en ese proceso que sabemos que no es fácil.

La parte de “cambia tu vida” es la parte más psicológica, enfocada a la actitud, a cómo afrontar los problemas, a cómo organizarte, a cómo ser más efectivo en el trabajo, a las relaciones sociales… Todo lo que es más bien crecimiento personal.
Al final, todo eso me lo ha dado la edad, como a cualquiera. Con los años vas encontrando herramientas, vas viendo y tomándote todo de otra forma. Ahí es cuando empiezas a disfrutar la vida de verdad. Así que, todo lo que he aprendido a lo largo de estos casi 48 años lo cuento ahí.

Tras tanto tiempo al pie del cañón y mostrándote tan transparente, ¿cómo has logrado mantener una imagen y seña de identidad tan clara e intacta?

Me resulta muy fácil porque “Isasaweis” es Isabel Llano, no hay ni trampa ni cartón. No tengo que impostar nada. Creo que es así porque estoy en casa un día, se me ocurre algo, enciendo la cámara y la cuento tal cual. Como si levantase el teléfono y llamase a mi mejor amiga, “Angi, te voy a contar una cosa…”. Es lo mismo, enciendo la cámara y lo cuento igual. Entonces, es muy sencillo. No tengo que pensar cada palabra que digo.
El otro día, hablando con uno de mis mejores amigos, él me decía “entonces grabas todo sin guion ni nada” y es así, “no me he hecho un guion en la vida”, le dije. Mientras me visto o me arreglo para grabar voy pensando. Mi cabeza va funcionando y diseñando cómo lo quiero contar o explicar. Así que, es tan fácil porque simplemente es ser yo.

Con las nuevas generaciones, las redes sociales y las exigencias de las audiencias, ¿dirías que es más difícil crear contenido de calidad?

Creo que el contenido que creas está en tu mano, entonces es igual de fácil que antes. Es más, es mucho más fácil ahora, porque tenemos las herramientas. Hace años, tenía que ir a comprarme una cámara, tarjetas de memoria, meter la tarjeta en la cámara, enchufar el micrófono y grabar. Una vez que conseguía grabar, tenía que sacar la tarjetita, meterla en el portátil, descargar algún programa de edición de vídeo, editarlo, exportarlo, pasarlo a la plataforma a la que lo quería subir, darle a subir… Ahora, apoyas el móvil en cualquier lugar, grabas, lo editas en un segundo y lo subes a internet. Ahora es muy fácil.

Lo que sí es mucho más difícil que antes es llegar a la audiencia. Antes, te seguían cincuenta mil personas y esas cincuenta mil veían tu video. Porque claro, éramos pocas personas. Ahora, cada vez que alguien entra en Instagram, tiene tal bombardeo de información, vídeos y contenido que es imposible vernos a todos. De hecho, sé que hay gente con la notificación de alarma activada para que les avise cada vez que subo algo y así no perderse nada. Pero hay otras personas que al igual que me siguen a mí, siguen a más personas y claro, no se puede ver todo.
Así que, es más difícil llegar, pero creo que a quien le gustas especialmente, le gusta tu contenido y lo que le cuentas… Esa persona, si hace tiempo que no te ve dice “uy, hace tiempo que Instagram no me enseña a Isa, voy a entrar en su perfil a ver qué pasa”.

Tras tu éxito en redes sociales, libros y programas de televisión, ahora, ¿qué nuevas aventuras esperan a Isasaweis?

No lo sé, iba a decir “afortunadamente”, pero no quiero tener falsa modestia, porque creo que todo lo que he conseguido es porque me lo he currado mucho. He trabajado muchísimo y sigo haciéndolo. En estos 15 años, no he llamado a una puerta porque me han venido a buscar. He tenido esa suerte y no he propuesto proyectos si no al revés.

He hecho cosas en televisión, he tenido una columna en un periódico, he trabajado en revistas, en radio… He hecho un montón de cosas a parte del contenido que creo como Isasaweis en mis redes sociales. Es más, recientemente, he sido modelo de una firma de novias de Málaga, que se llama Torralba. Y realmente, son cosas que nunca hubiera pensado. Entonces, yo, que me apunto a un bombardeo, siempre estaré agradecida por todos los que quieren confiar en mí para algún proyecto. Si creo que lo puedo hacer, bien; y si no, me esfuerzo en hacerlo. Así que siempre estoy con las puertas abiertas a cualquier cosa que me puedan ofrecer.

Yo me propongo seguir trabajando, seguir haciéndolo bien, que a la gente que me sigue le siga gustando lo que hago. Pero no me he propuesto, por ejemplo, salir en Masterchef, como me dice mucha gente. “Isa, ¿cómo no te llevan a Masterchef?”, si ellos están interesados en mí, yo encantadísima.
 

Por favor, activa JavaScript en tu navegador para completar este formulario.